Vivimos en el norte y en abril, que es cuando hacemos las fotos, suele llover bastante. A veces, tenemos que cambiar varias veces la fecha para hacer el reportaje en exterior y a veces, estáis más tranquilas sin estar pendientes de que no se manche el traje.
Es por eso, que la idea de hacer una mini sesión en el estudio antes de la comunión y dejar el exterior para después, también es buena opción!
Las fotos en el estudio son muy sencillas; paredes blancas, una gran ventana y algunos elementos de atrezzo es todo cuanto usaremos. Así, no restaremos protagonismo al traje de comunión y a la carita de nuestro modelo 😉
Tendréis una foto de recordatorio para regalar a vuestros seres queridos el día de la ceremonia y vuestro álbum final será más variado con las fotos de estudio+exterior.
Quedaremos la semana siguiente a la ceremonia para hacer las fotos de exterior, ya con más calma y sin prisas 🙂
Cuéntame, qué opción prefieres tú?
